Por J. Lump
No me equivoco si afirmo que ninguno de ustedes habrá tenido que pelear contra gladiadores en el Circo Máximo, ni habrá cruzado un río de cocodrilos sobre una cuerda invisible. Pero creo que todos, sin excepción, en algún momento de su vida han tenido que superar esa horrible prueba: la casa-que-te-vuelve-loco. Yo sí. Demasiadas. Continúa leyendo Una mera formalidad.
Por J. Lump.
Solo estaba él en la sala de espera. Sentado en una silla alta, con el bastón apoyado sobre el sofá más cercano. Tenía la mirada puesta en un punto impreciso de la habitación. Tranquilo, esperaba a alguien que habría sido llamado minutos antes por el médico. Continúa leyendo Todo llega.
Por J. Lump. Llevábamos alguna cerveza de más y preferimos pasar a temas más amables. Volví a casa como pude, pero no conseguí dormirme pensado en el jodido cine español. Continúa leyendo ¿Qué han hecho los romanos por nosotros?
Por J. Lump. Muchas generaciones la habitaron. Ni la guerra ni el fuego acabaron con ella. Se sobreponía a las catástrofes naturales con rapidez y sólo una terrible tormenta, años atrás, logró dibujar un par de cicatrices en su rostro. Fue la pena la que hizo que se consumiera, poniendo fin a más de un siglo de existencia. Continúa leyendo La casa
Por J. Lump.
James Rhodes te invita a entrar con él en el pozo de mierda en el que estuvo metido en tantas ocasiones. Se desnuda emocionalmente y te obliga a mirar de frente lo bajo que puede llegar a caer un ser humano. Continúa leyendo Advertencia: este libro te folla la mente.
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